(basado en el libro «Qué hace ser a una mujer verdaderamente sexy» de Julia Grice)

El sex appeal es una compleja combinación de factores, como la forma en que una mujer se siente a sí misma y su propio cuerpo, la manera que se siente respecto a los hombres, sus preferencias, las señales que manda a los demás. Es la comunicación de cierto sentimiento de belleza que sale del interior. No tiene que ver con la edad. Una mujer sexy proyecta un aura, se siente segura de sí misma, irradia feminidad, ama la vida.

Aspectos a tener presentes:

  • Cuidar el físico y no ser masculina. Realzar las diferencias: piel suave y sin vello, labios carnosos (rojos y brillantes), cejas finas, pechos, caderas anchas y contorneadas, voz dulce y cordial. Tonificar la musculatura. Vestir con gusto y sin ser muy llamativa. Elegante pero levemente desenfadada. La mejor prenda: un vestido insinuando el cuerpo que lleva dentro o una falda con vuelo, indicando movimiento. Colores preferibles: rojo, negro y blanco. Usar tacón alto, mejor con punta o mostrando el nacimiento de los dedos del pie. Una melena media o larga, secada al natural, limpia y suave pero no demasiado compuesta. El maquillaje discreto. No es sexy fumar, beber demasiado, decir tacos, mascar chicle ni morderse las uñas.
  • Cuidar el olor corporal. Los olores son eróticos y se perciben a nivel inconsciente. Mantener una higiene corporal pero sin enmascarar los olores naturales. El perfume es más eficaz aplicado en los puntos del cuerpo más irrigados: parte interior del codo, muñecas, parte posterior de las rodillas, pecho y base de la garganta.
  • Sacar partido del lenguaje corporal. Prodigar un contacto visual, mantener la mirada y bajarla tímidamente de tanto en tanto. Tocarse el pelo o la nuca. Ladear la cabeza. Juguetear con algún objeto (una copa, un collar, un anillo, un llavero,…). Encogerse los hombros. Cruzar y descruzar las piernas. Sonreír ampliamente.  Rozar o apretar el brazo del hombre durante la conversación. Moverse con soltura. Caminar a paso suelto y seguro, con un leve contoneo, la cabeza alta, los hombros hacia atrás y sacando el pecho con orgullo.
  • Hacer que el hombre se considere deseable, especial, único. Admirar su virilidad. Encontrar algo que alabar. No mostrarse recelosa, ni quejarse o estar de mal humor. Mostrarse disponible, cercana y atenta. Pedir pequeños favores como ayuda para descorchar una botella. Bailar juntos con coquetería, mostrando atención en él.
  • Reforzar el pensamiento positivo sobre ti mima. «Soy sexy, soy muy
    atractiva, él me ve así y yo sé que esta noche tengo un aspecto
    estupendo; estoy francamente guapísima.» Cualquier éxito a nivel
    profesional o personal contribuye a brillar. Cultiva tus aficiones y
    procura estar al día para resultar interesante. Sentirse mujer y disfrutar de serlo.
  • Si te sientes sexy… eres sexy!!!