(resumen del libro de Linda Georgian)

El proceso de búsqueda de la pareja ideal puede constituir una excelente oportunidad para aprender algo sobre nosotros mismos y nuestras metas en la vida. Pero recuerda que no habrá en tu vida relación más importante que la que establezcas contigo misma. Enamorarse de uno mismo es el principal secreto de la felicidad. El amor propio significa ser pacientes y amables con nosotros mismos. Es cuidar de uno mismo para convertirse en la mejor persona que cada cual puede llegar a ser. Es atender nuestras necesidades físicas, emocionales, mentales y espirituales.

Cuando dependemos de otro, nos perdemos para nosotros mismos y nos convertimos en él; pero cuando aprendemos a independizarnos, nos encontramos y volvemos a ser nosotros. Sólo entonces se hace posible el amor [Susan Jeffers].

La ley del espejo indica que cada cual debe llegar a ser esa persona con la que a él le gustaría estar.

Hay que pensar positivamente de todos, incluso de los que nos han hecho daño, lo que no impide que tengamos derecho a decidir con quién queremos compartir nuestra vida.

Cuando no nos gusta la vida que llevamos o nos sentimos heridos por algo o por alguien, lo mejor es practicar el amor ayudando a los demás.

 

Haz todo el bien que puedas, de todas las formas posibles, a todas las personas que puedas, en todos los lugares y con el mayor celo que seas capaz de desarrollar, hasta donde te sea posible [John Wesley]

Allí donde encontramos un ser humano, hay siempre una oportunidad para ser amables [Séneca]

Cuando buscamos la parea ideal, debemos saber qué estaríamos dispuestos a hacer por amor. Conviene escribir una lista con lo que hacemos con gusto y lo que desearíamos cambiar en nuestra forma de responder al amor.

Nunca podremos llegar a ser lo que deseamos si nos empeñamos en seguir siendo lo que somos [Max de Pree].

Los demás no cambiarán sólo por el hecho de que nosotros los queremos, sino porque ellos quieran cambiar. Todo cambio personal implica un trabajo interior. El amor puede proporcionar la seguridad para que una persona intente crecer y mejorar su vida, pero es ella la que debe hacer la elección de cambiar e intentarlo.

Vivir con amor nos hace libres para ser buenos con nosotros mismos y con nuestros semejantes.

Tenemos la tendencia a ofrecer el amor como si fuera un bien escaso. Es como si temiéramos que se acabara y nos pudiéramos quedar sin nada que ofrecer. Por otro lado, dar cariño nos hace más vulnerables y nos obliga a sufrir y a correr ciertos riesgos. Pero el hecho cierto es que no dejamos de sufrir por dejar de amar, ya que esos sentimientos forman parte del ser humano, y si no sufriéramos no podríamos conocer la maravilla que representan la alegría, la paz y la felicidad Una vida llena de amor es el mayor desafío y la mayor satisfacción que podemos experimentar No nos ahorra ni el sufrimiento ni la tristeza, pero nos da energía para vivir, para superar todo lo malo y para experimentar la felicidad, la alegría, la fe y la esperanza.

Todas las relaciones son regalos que nos ayudan a entendernos y a entender.

Cada jugador debe aceptar las cartas que la vida le reparte; pero una vez que las tiene en las manos, sólo él decide la jugada [Voltaire]

Cuando nos concentramos en las heridas del pasado, no damos a las personas que vamos encontrando por la vida la oportunidad de comenzar una relación limpia. Sin duda podrá haber heridas nuevas, pero cuanto menos levantemos el vendaje para enseñarlas, antes nos curaremos, y una vez curados estaremos más cerca de conseguir la relación deseada.

Es imprescindible tener fe en encontrar lo que buscamos. Si estamos convencidos de elegir mal, acabaremos por atraer a las personas inadecuadas. Las creencias son los mejores instrumentos para realizar nuestros deseos.

La vida es una cuestión de elecciones, y cada elección tiene unas consecuencias, de las que podemos extraer una lección si no queremos repetir los errores

Prepararnos significa crear la oportunidad de desarrollar una relación con una persona concreta, pero somos igualmente libres para dejarla y buscar otra.

La intuiciones una brújula que nos señalará el camino. Visualizar los deseos es fabricar una de las herramientas más poderosas para conseguirlos.

Nunca hay que olvidar que hay que respetar la libertad del otro y sus opiniones sobre nosotros, aunque, por otro lado, siempre hay que arriesgar algo para lograr lo que queremos. Por mucho que suframos siempre podremos recuperarnos y salir adelante. La alternativa al riesgo no es menos dolorosa; es, sencillamente, un dolor distinto; es padecer el miedo y la soledad.

El compromiso nos fortalece para perseverar a pesar de todos los obstáculos.